BUDAPEST, HUNGRÍA – La actriz Kirsten Dunst vivió un momento de gran tensión mientras filmaba en Hungría. Lo que comenzó como una oportunidad para combinar trabajo y familia se tornó en una experiencia angustiante cuando uno de sus hijos sufrió un problema de salud inesperado. Dunst había decidido llevar a su esposo, Jesse Plemons, y a sus hijos, Ennis y James, a Budapest, pensando que sería una excelente oportunidad para disfrutar juntos mientras ella trabajaba en el set.
La actriz, conocida por su papel en Las vírgenes suicidas, estaba filmando la comedia The Entertainment System Is Down junto a Keanu Reeves. El film, dirigido por Ruben Östlund, explora las desventuras de pasajeros de un avión, un tema que resonó de manera inesperada en la vida real de Dunst. Según relató a los medios, su hijo menor, James, experimentó un incidente de salud que calificó como “extremadamente aterrador”, aunque no ofreció detalles específicos sobre lo ocurrido.
Un susto que unió a la familia
Tras el incidente, Dunst decidió que su familia regresara a Los Ángeles para contar con el apoyo de su red familiar. La actriz compartió que el episodio le hizo imaginar “los peores escenarios” posibles para su hijo, una experiencia que comparó con el miedo que sienten los personajes de la saga Destino final. “Así es como se siente ser madre a veces”, confesó Dunst, añadiendo que el suceso los unió más como familia.
Una vez superado el susto y finalizado el rodaje, Dunst prometió a su hijo James que podrían viajar al destino de su elección. El pequeño eligió una playa donde pudiera construir castillos de arena sin que se los llevara la corriente, y la familia decidió que las Bahamas serían el lugar ideal para sus próximas vacaciones.
Incidentes familiares en el ojo público
A pesar de que Dunst suele mantener su vida privada alejada del foco mediático, no es la primera vez que comparte anécdotas familiares. En abril de 2024, durante una entrevista en el programa de Jimmy Kimmel, ambos recordaron un incidente entre sus hijos, quienes asisten al mismo colegio. Ennis, el hijo de Dunst, y Billy, el hijo de Kimmel, tuvieron un altercado en el aula que terminó en lágrimas.
Durante el programa, Kimmel narró que su hijo Billy se molestó cuando encontró a Ennis sentado en su silla tras regresar de afilar un lápiz. La situación provocó risas entre los adultos, quienes concluyeron que sus hijos eran “fuentes poco confiables” de información. “Son un grupo de chicos muy dulce”, aseguró Dunst, quien rara vez comparte fotos de sus hijos.
Reflexiones sobre la maternidad y el futuro
En la misma entrevista, Dunst bromeó sobre el temor que siente al pensar en el futuro escolar de James, a quien cariñosamente llaman “Jimmy” cuando se porta mal. “Es un pequeño loco”, comentó entre risas, reflejando la mezcla de amor y preocupación que caracteriza la maternidad.
Este tipo de anécdotas, aunque personales, ofrecen una ventana a la vida cotidiana de una figura pública como Dunst, y reflejan las preocupaciones universales de los padres en todo el mundo. A medida que continúa su carrera, la actriz parece equilibrar con habilidad su vida profesional y personal, aprendiendo y creciendo a partir de las experiencias que enfrenta junto a su familia.