Exdirectiva de Fundación Jackson Health desvió $4.3M para lujos

MIAMI, EE.UU. – La exdirectiva de la Fundación Jackson Health, Charmaine Gatlin, se declaró culpable de haber desviado más de 4.3 millones de dólares para gastos personales, en un esquema fraudulento que se extendió por una década. Gatlin, quien fue Chief Operating Officer (COO) de la fundación, operó el fraude entre 2014 y 2024, a pesar de recibir un salario base que oscilaba entre 185,000 y 290,000 dólares anuales, además de otros beneficios.

Según los documentos judiciales, Gatlin admitió haber canalizado fondos hacia cuentas personales y de terceros, utilizando facturas falsas, sobornos y el uso indebido de donaciones restringidas. Parte del dinero fue desviado a través de un contrato con una empresa audiovisual en Georgia, que facturó cerca de 2 millones de dólares por servicios inexistentes. El propietario de la empresa, Yergan Jones, pagó a Gatlin un millón de dólares en sobornos, parte de los cuales se destinaron a cubrir deudas personales.

Lujo y abuso con fondos para pacientes

Además de los sobornos, Gatlin ordenó a un proveedor de mercancías comprar artículos de lujo, incluyendo marcas como Louis Vuitton y Gucci, prometiendo mantener la relación comercial con la fundación. Utilizó donaciones restringidas, destinadas a programas médicos, para adquirir bienes personales. Un ejemplo notable fue la aprobación de 55,101 dólares para comprar “botiquines de primeros auxilios”, que eran kits falsamente etiquetados.

La investigación del FBI reveló que Gatlin había convertido la red de proveedores de la fundación en un canal de enriquecimiento personal, mientras mantenía una apariencia de eficiencia administrativa. El caso representa una grave violación de la confianza pública y filantrópica en una institución clave para el sistema de salud de Miami-Dade.

Un golpe a la confianza filantrópica del condado

La Fundación Jackson Health es una organización sin fines de lucro que canaliza donaciones privadas al sistema público de hospitales Jackson Health. Cada año, recauda millones de dólares destinados a mejorar la atención médica de los residentes más vulnerables. El caso Gatlin es un duro golpe a la confianza en una institución que sirve como puente entre la comunidad y el sistema de salud.

“Los fondos donados con el propósito de salvar vidas no pueden convertirse en instrumentos de enriquecimiento personal”, subrayó el fiscal federal Jason A. Reding Quiñones.

El agente especial Brett D. Skiles del FBI en Miami afirmó que el caso “envía un mensaje claro: quienes abusan de instituciones benéficas enfrentarán consecuencias severas”.

Reacción institucional y medidas de control

El caso motivó una revisión exhaustiva de los mecanismos de supervisión y auditoría interna dentro de la fundación. Estas medidas buscan evitar que un solo ejecutivo pueda autorizar pagos significativos sin revisión colegiada, uno de los vacíos que permitió el fraude prolongado.

El fiscal federal Jason A. Reding Quiñones reiteró que el caso ejemplifica la determinación del gobierno federal para proteger los fondos públicos y las donaciones filantrópicas en instituciones que sirven a la comunidad.

“Cuando alguien roba a una organización benéfica, no solo roba dinero: roba esperanza, recursos y confianza”, subrayó.

Posible sentencia

Charmaine Gatlin será sentenciada el 25 de noviembre de 2025 en el tribunal federal de Miami. Enfrenta una pena máxima de 20 años de prisión, además de posibles restituciones económicas y confiscación de bienes para compensar el daño causado.

El impacto reputacional sobre la fundación podría ser aún mayor, pues el caso se produjo en un contexto de alta sensibilidad financiera para el sistema hospitalario público, que enfrenta presiones presupuestarias y crecientes demandas sociales.