jue. Sep 4th, 2025

BUENOS AIRES, ARGENTINA – Las sentadillas, un ejercicio fundamental en las rutinas de entrenamiento, ofrecen beneficios que van mucho más allá del fortalecimiento de las piernas. Aunque comúnmente se asocian con el trabajo de la parte inferior del cuerpo, las sentadillas contribuyen significativamente a la movilidad y al rendimiento físico general, según especialistas citados por Verywell Health y diversas investigaciones científicas.

Este ejercicio, que involucra múltiples articulaciones, no solo desarrolla la musculatura, sino que también mejora la salud general. Los beneficios menos conocidos de las sentadillas amplían su relevancia en las rutinas de ejercicio, destacándose por su capacidad para reducir el riesgo de lesiones, fortalecer el core, aumentar el gasto calórico, mejorar la movilidad y aumentar la flexibilidad.

Beneficios integrales de las sentadillas

Las sentadillas son conocidas por disminuir el riesgo de lesiones al incrementar la fuerza, la flexibilidad y la coordinación. Este efecto se traduce en un mejor equilibrio y mayor facilidad de movimiento, lo que reduce la probabilidad de sufrir lesiones. Al activar el core, este ejercicio también protege la espalda y favorece una postura adecuada en la vida diaria.

Además, las sentadillas son eficaces para la quema de calorías. Al activar múltiples grupos musculares simultáneamente, el cuerpo requiere más oxígeno, lo que incrementa el gasto calórico. Según Verywell Health, el organismo quema cinco calorías por cada litro de oxígeno consumido, lo que convierte a las sentadillas en una opción ideal para quienes buscan controlar su peso.

Un estudio publicado en el Journal of Strength and Conditioning Research revela que los adultos que incorporaron sentadillas en su rutina durante 12 semanas mostraron mejoras significativas en fuerza muscular, equilibrio y movilidad funcional.

Músculos implicados y técnica correcta

Las sentadillas no solo trabajan los cuádriceps y glúteos, sino también el core. Entre los principales músculos implicados se encuentran el erector de la columna, glúteo mayor y medio, isquiotibiales, oblicuos internos y externos, transverso del abdomen y cuádriceps. Esta participación muscular explica por qué la sentadilla es considerada un ejercicio integral.

Para ejecutar correctamente una sentadilla con el peso corporal, los especialistas recomiendan ubicarse de pie con los pies separados a la altura de las caderas y los dedos orientados hacia adelante o ligeramente hacia afuera. Las manos deben situarse juntas frente al pecho, el pecho debe permanecer erguido, y las caderas deben inclinarse hacia atrás como si se tomara asiento, con las rodillas separadas. Es crucial descender hasta que los muslos queden paralelos al suelo antes de regresar a la posición inicial.

Precauciones, riesgos y progresión

La técnica correcta y la progresión gradual son esenciales para evitar lesiones en la espalda y las rodillas. Un movimiento inadecuado, como inclinar el tronco en exceso o redondear la parte baja de la espalda, puede causar problemas. Por ello, se recomienda aprender la técnica utilizando solo el peso corporal.

En caso de molestias o dolor, especialmente en personas con condiciones como osteoartritis, es aconsejable consultar a un fisioterapeuta antes de incorporar sentadillas a la rutina. Un profesional puede determinar si el ejercicio es adecuado y proporcionar recomendaciones personalizadas.

Una vez dominada la sentadilla básica, quienes buscan progresar pueden optar por variantes como la sentadilla de espalda o la lateral, lo que ofrece nuevos desafíos y posibilidades de adaptación al entrenamiento.

Implicaciones y análisis futuro

La práctica regular de sentadillas no solo contribuye a la mejora del rendimiento físico, sino que también tiene implicaciones positivas para la salud general. Al fortalecer el core y mejorar la movilidad, este ejercicio puede desempeñar un papel crucial en la prevención de lesiones y en el mantenimiento de una vida activa y saludable.

Con el aumento del interés por el fitness y la salud integral, es probable que las sentadillas continúen siendo un componente clave en las rutinas de ejercicio. A medida que más personas descubren sus beneficios ocultos, la sentadilla podría consolidarse aún más como un ejercicio esencial para el bienestar físico y mental.