BARCELONA, ESPAÑA – Aleix Espargaró, el expiloto de MotoGP, ha compartido una emotiva reflexión tras su accidentado debut en el Tour de Austria con el equipo Lidl-Trek. A pesar de sufrir una rotura del ligamento del pulgar en la tercera etapa, Espargaró se mostró orgulloso de su rendimiento en esta nueva aventura ciclista.
El catalán, que se embarcó en este desafío a los 35 años, reveló a través de su perfil de Instagram el dolor que experimentó durante la carrera. “Tenía mucho dolor y no podía frenar. Volé a Barcelona y me han confirmado una rotura del ligamento del pulgar”, explicó Espargaró, quien se vio obligado a abandonar la competencia.
Un reto físico y mental
A pesar del infortunio, Espargaró destacó las intensas emociones vividas en el pelotón profesional. “La tensión, la velocidad… es algo imposible de imaginar al verlo por la tele. ¡Ni tiempo para mear!”, comentó con entusiasmo. Su participación en el Tour de Austria no solo fue un reto físico, sino también una prueba de su capacidad para adaptarse a un entorno completamente nuevo.
El expiloto subrayó que su presencia en el equipo Lidl-Trek no fue un simple movimiento publicitario. “El equipo solo me habría dejado debutar si veían que tenía el nivel suficiente. Y creo que en estas etapas lo he demostrado”, afirmó, enfatizando que su rendimiento fue fruto de su esfuerzo y dedicación.
El apoyo del público y el equipo
Espargaró se mostró sorprendido y agradecido por el apoyo recibido tanto en las carreteras como en las redes sociales. “Ha sido increíble, tanto en la carretera como en redes. Incluso medio pelotón me ha deseado suerte”, expresó. Este respaldo fue un impulso adicional para el piloto, que está acostumbrado a la presión y a ser juzgado constantemente.
Además, destacó la experiencia de haber podido contribuir al éxito del equipo, ayudando a su compañero Héctor a lograr su primer podio. “Ha sido brutal poder ayudar al equipo y a Héctor a lograr su primer podio. Apunten su nombre: futuro crack”, comentó Espargaró, quien no escatimó en elogios para sus compañeros y el personal del equipo.
Mirando hacia el futuro
A pesar de la lesión, Espargaró no pierde el ánimo y ya piensa en sus próximos pasos en el ciclismo. Su mensaje de agradecimiento incluyó un reconocimiento especial al staff del equipo: “Gracias infinitas a Aritz, Markel, Josu y a todos los auxiliares. Ganar con cracks es ‘fácil’, pero hacer ciclista a un piloto de MotoGP ha sido next level”.
Finalmente, Espargaró animó a sus seguidores a seguir su videoblog exclusivo sobre esta experiencia en el ciclismo profesional. “¡Que viva el ciclismo!”, concluyó, dejando claro que su pasión por este deporte está más viva que nunca.
El debut de Aleix Espargaró en el World Tour a los 35 años no solo ha sido un hito personal, sino también un ejemplo de cómo la determinación y el amor por el deporte pueden llevar a nuevas y emocionantes aventuras.