dom. Jul 27th, 2025

LONDRES, REINO UNIDO – En un testimonio conmovedor y revelador, el actor británico Ashley Walters, conocido por su papel en la serie Top Boy, ha compartido su lucha de casi dos décadas contra el alcoholismo y la drogadicción. En una entrevista reciente con Men’s Health, Walters, de 42 años, se mostró optimista al acercarse a su quinto aniversario de sobriedad, un logro personal significativo.

Walters confesó que su batalla con la adicción fue una guerra silenciosa librada tras las cámaras, mientras mantenía una imagen pública de éxito. “El alcoholismo es una enfermedad… La parte fácil es dejar de consumir. La parte difícil es lidiar con el problema en tu cabeza”, comentó con franqueza.

Infancia y primeros encuentros con el alcohol

La relación de Walters con el alcohol comenzó a los 11 años, durante una fiesta familiar. Criado en Peckham, al sur de Londres, por su madre, encontró en el arte un refugio gracias a su educación en la Sylvia Young Theatre School. Sin embargo, el éxito temprano en la música con So Solid Crew y el tema “21 Seconds” trajo consigo un estilo de vida tóxico que alimentó su dependencia.

Walters describió cómo el alcohol se convirtió en un recurso para calmar su ansiedad social, una herramienta para comunicarse en un mundo que le resultaba intimidante. “Siempre miraba a los demás y me preguntaba cómo podían comunicarse tan maravillosamente, y yo no tenía esa habilidad”, confesó.

Caída y consecuencias profesionales

El ascenso de Walters en la escena musical y televisiva fue acompañado de problemas legales y personales. Fue condenado a detención juvenil por posesión de un arma de fuego y amenazas, incidentes que, según él, reflejan su estado emocional y sus elecciones erróneas. “No diría que el universo conspiraba en mi contra. Tenía mucho que ver con dónde estaba mi cabeza y lo que estaba haciendo”, explicó.

Durante casi 20 años, el abuso de sustancias afectó su carrera y relaciones, llevándolo a perder oportunidades clave, como su salida de la serie Hustle de la BBC. Estos episodios, marcados por el consumo y la conducta errática, fueron un reflejo del deterioro provocado por la adicción.

Decisión de cambio y recuperación

El punto de inflexión llegó en noviembre de 2020, cuando una confrontación con su hija de seis años lo llevó a buscar ayuda profesional. Ingresó a un centro de tratamiento y comenzó un proceso de recuperación basado en el programa de 12 pasos, enfrentando los conflictos emocionales que alimentaban su dependencia.

Walters describió su proceso de recuperación como un viaje hacia la claridad mental y la confianza renovada, aprendiendo a desenvolverse en espacios sociales sin recurrir al alcohol. “Ahora me presento y me obligo a estar en situaciones que antes habría evitado”, compartió, destacando una reciente conversación con el actor Michael B. Jordan como ejemplo de su evolución personal.

Nueva etapa profesional y personal

En paralelo a su recuperación, Walters ha experimentado un resurgimiento artístico. Su papel en la serie Adolescence le permitió explorar una faceta más vulnerable, reflejando su propia transformación como padre. Además, debutó como director con la serie A Thousand Blows y está trabajando en su primer largometraje, Animol, inspirado en la vida del escritor Nick Love.

La reflexión sobre la paternidad se ha convertido en un eje central de su vida. Habiendo sido padre a los 17 años, Walters se cuestiona si ha repetido patrones familiares, buscando ahora ser un padre presente y consciente. “Mi mayor logro es mi familia”, afirmó, destacando la importancia de la estabilidad emocional y la presencia activa en el hogar.

Consciente de las limitaciones que su historial judicial impone, especialmente en Estados Unidos, Walters se muestra optimista sobre su futuro. “No soy tan ingenuo como para pensar que voy a estar dirigiendo una película de Marvel la próxima semana, pero me alegra que la gente quiera hablar conmigo y ver a dónde llevan esas conversaciones”, comentó.

Para Walters, la clave de esta nueva etapa está en la autenticidad. “Conócete a ti mismo, luego sé tú mismo”, concluyó, mientras avanza en su carrera sin máscaras, guiado por la claridad que ha encontrado en su proceso de recuperación.