EL PUERTO DE SANTA MARÍA, ESPAÑA – La prestigiosa Clipper Round the World Yacht Race, conocida por ser una de las regatas más exigentes e inclusivas del mundo, ha hecho escala en el puerto deportivo de Puerto Sherry. Esta parada es parte de la primera etapa de la carrera, que comenzó en Portsmouth, Reino Unido, y se dirige hacia Punta del Este, Uruguay, un viaje que se espera completar en aproximadamente 25 días.
Las diez embarcaciones participantes zarparon el 3 de septiembre desde las costas británicas y, tras recorrer más de 1.200 millas náuticas, han llegado a El Puerto de Santa María. Esta travesía inicial ha estado marcada por condiciones meteorológicas adversas, lo que ha provocado un ligero retraso en el calendario previsto. El próximo domingo, 14 de septiembre, las embarcaciones continuarán su rumbo hacia Sudamérica, coincidiendo con la salida de la Globe 40 desde Cádiz.
Un Epicentro de la Vela Internacional
Durante su estancia en Puerto Sherry, la marina se ha transformado en un vibrante centro de actividades náuticas y culturales. Conciertos, talleres, experiencias Clipper y visitas guiadas a bordo han atraído a residentes y visitantes. La Terraza Village ha ofrecido una mezcla de gastronomía, turismo y cultura, convirtiendo al puerto en un punto de encuentro internacional.
Medios de comunicación, incluyendo LA VOZ, han tenido la oportunidad de experimentar de primera mano la vida a bordo de estas embarcaciones. Durante una travesía por la Bahía de Cádiz, los participantes pudieron apreciar las vistas de El Puerto de Santa María, Cádiz y Rota desde el mar.
Historias de Superación y Trabajo en Equipo
A bordo del London Business School, la expedición fue recibida por tripulantes como el valenciano Luis Martínez-Curt del Qingdao y el joven barcelonés Lucas Roig del Unicef. Estos participantes, junto a otros equipos como Team Scotland, Power of Seattle Sports, y Yacht Club Punta del Este, forman parte de un grupo diverso que comparte el sueño de circunnavegar el mundo.
La Clipper Race permite a personas sin experiencia previa en navegación participar en un desafío de resistencia único. Luis Martínez-Curt comenta:
«Puedes no conocer a nadie cuando entras, pero formas un auténtico equipo. Son las personas con las que vas a compartir días y días».
Para muchos, como Luis y Lucas, esta aventura es posible gracias al apoyo de sus familias y patrocinadores.
El Desafío de una Vida
La ruta completa de la Clipper Race abarca 40.000 millas náuticas y atraviesa los océanos Atlántico, Antártico y Pacífico Norte. La carrera se compone de ocho etapas, con escalas en algunos de los destinos más espectaculares del mundo. Desde Portsmouth hasta Punta del Este, la segunda etapa llevará a los competidores de Sudamérica a Sudáfrica, y así sucesivamente hasta completar el circuito en julio de 2026.
Los participantes deben enfrentarse a condiciones extremas con recursos limitados. Cada tripulante lleva consigo alrededor de 15 a 20 kilogramos de equipaje, excluyendo ropa de agua y sacos de dormir. La alimentación es un aspecto crucial, con menús que proporcionan hasta 5.000 calorías diarias para soportar la exigente vida a bordo.
Lucas Roig describe la experiencia como una lección de convivencia y trabajo en equipo:
«Nos enseñan a trabajar en equipo y es una aventura de convivencia, pues los que vamos a bordo no nos conocemos y tenemos que convivir en un espacio reducido y espartano».
Un Costoso Sueño
Participar en la Clipper Race no es solo un desafío físico y mental, sino también económico. Cada etapa tiene un costo individual de entre 7.000 y 8.000 euros, sumando un total de aproximadamente 50.000 euros para completar toda la carrera. Sin embargo, para muchos, el precio es un pequeño sacrificio por la oportunidad de vivir una experiencia transformadora.
La Clipper Race continúa dejando una huella indeleble en la Bahía de Cádiz, inspirando a navegantes y soñadores de todo el mundo a embarcarse en sus propias aventuras en alta mar.