CIUDAD DE MÉXICO, MÉXICO – En el dinámico mundo laboral actual, las reuniones individuales con el jefe se han convertido en un elemento esencial para el desarrollo profesional. Ya sea que esté comenzando en un nuevo empleo o que busque avanzar en su carrera, estas reuniones pueden ser una poderosa herramienta para influir en su experiencia laboral, fortalecer su relación con su gerente y fomentar su crecimiento futuro.
Según Steven G. Rogelberg, autor del libro “Glad We Met: The Art and Science of 1:1 Meetings”, las reuniones individuales son más efectivas cuando se centran en las necesidades y aspiraciones del empleado, en lugar de enfocarse únicamente en los intereses del gerente. A través de su investigación, Rogelberg identificó cinco comportamientos clave que pueden transformar estas reuniones en oportunidades significativas de desarrollo.
Preparación: Sepa lo que necesita
Antes de cada reunión, es crucial reflexionar sobre los problemas a corto plazo y las metas a largo plazo. Considere cómo su gerente puede ayudar a superar obstáculos actuales o proporcionar orientación. Una vez que tenga más experiencia en su puesto, identifique áreas de mejora personal. Esta preparación le permitirá responder de manera reflexiva y formular preguntas relevantes durante la reunión.
Curiosidad: Sea curioso
Aborde cada reunión con la intención de aprender y crecer. Participe activamente haciendo preguntas, escuchando atentamente y expresando sus pensamientos. La comunicación no verbal también juega un papel importante; mantener una postura erguida, inclinarse ligeramente hacia adelante y mantener contacto visual puede demostrar interés genuino y facilitar una interacción más rica.
Relaciones: Construya una relación
Utilice estas reuniones para conocer a su gerente tanto a nivel personal como profesional. Mostrar interés genuino en sus experiencias y opiniones puede enriquecer la conversación. Permítase ser vulnerable y busque oportunidades para expresar gratitud por el interés de su gerente en su desarrollo.
Retroalimentación: Pida y reciba retroalimentación
Solicitar retroalimentación es esencial para el desarrollo profesional. Al pedirla, no solo obtiene información valiosa para mejorar, sino que también demuestra su disposición a aceptar y considerar las perspectivas de su supervisor. Recibir retroalimentación, especialmente crítica, puede ser desafiante, pero es fundamental mantener una actitud positiva y ver estas críticas como oportunidades de crecimiento.
“La retroalimentación de su jefe puede ser una herramienta valiosa para mejorar su desempeño. Agradezca siempre a su supervisor por compartir sus pensamientos, ya que esto refleja un esfuerzo por ayudarle a crecer.”
En conclusión, las reuniones individuales con su jefe no deben ser vistas como simples formalidades, sino como valiosas oportunidades para el crecimiento personal y profesional. Al prepararse adecuadamente, demostrar curiosidad, construir relaciones sólidas y manejar la retroalimentación de manera constructiva, puede maximizar el impacto positivo de estas interacciones en su carrera.
En un mundo laboral cada vez más competitivo, aprovechar al máximo cada interacción con su jefe puede marcar la diferencia en su trayectoria profesional. Siguiendo estos consejos, no solo mejorará su desempeño, sino que también fortalecerá su posición dentro de la organización.