vie. Jul 4th, 2025

VALENCIA, ESPAÑA – Violeta Mangriñán, una de las influencers más prominentes de España, ha vuelto a ser el centro de atención esta semana tras protagonizar la portada de la revista Women’s Health. En la imagen, la valenciana posa con un atuendo deportivo bajo el lema: “La energía y la salud están por encima de la belleza”. Sin embargo, este logro personal se ha visto empañado por una oleada de críticas en redes sociales que cuestionan su aspecto físico.

Durante su viaje a Corea del Sur, Mangriñán se ha enfrentado a comentarios negativos de internautas que han calificado su apariencia como poco saludable. Comentarios en la publicación de Instagram de la revista incluyen afirmaciones como:

“Está en los huesos de apenas comer y tiene que cagar verde con tanto matcha”

y

“esto saludable no es, se llama pasar hambre y restricción con ejercicio escaso o nulo”

. Estos comentarios han generado un debate sobre la responsabilidad de las revistas en la promoción de imágenes corporales saludables.

La respuesta de Violeta Mangriñán

Lejos de permanecer en silencio, Violeta utilizó sus historias de Instagram para responder a las críticas. Con un tono irónico, cuestionó la empatía de aquellos que lanzan comentarios hirientes sin conocerla personalmente: “¿Y esta gente dormirá ‘tan pichi’ después de comentar semejantes barbaridades sobre alguien que no conoce?”, escribió.

En un acto de vulnerabilidad, Mangriñán compartió su experiencia personal con los trastornos alimenticios, revelando que hace seis años sufrió problemas alimenticios que decidió hacer públicos para dar visibilidad a su realidad en ese momento.

“Hace seis años sufrí problemas alimenticios y decidí contarlo a través de mis redes sociales con el fin de dar visibilidad y mostrar mi realidad en ese momento”

, explicó la influencer.

Un pasado superado

Violeta asegura que ha dejado atrás su mala relación con la comida. “Estoy más que curada. No solo no le tengo miedo a la comida, sino que disfruto como nunca antes de comer”, afirmó. Sin embargo, subrayó el impacto negativo que los comentarios intolerantes pueden tener sobre personas que aún luchan con trastornos alimenticios.

“Os aseguro que lo último que necesita una persona enferma de anorexia es leer los comentarios que he leído”

, añadió.

El debate sobre la imagen corporal en los medios

La controversia en torno a la portada de Women’s Health ha reavivado el debate sobre la representación de la imagen corporal en los medios de comunicación. Expertos en salud mental advierten que las imágenes que promueven estándares de belleza extremos pueden contribuir a la inseguridad corporal y fomentar trastornos alimenticios. Según un estudio de la Universidad de Navarra, el 30% de los jóvenes en España han experimentado algún tipo de dismorfia corporal debido a las influencias de los medios.

El caso de Violeta Mangriñán pone de relieve la necesidad de un enfoque más inclusivo y saludable en la representación de la belleza. La influencer ha expresado su deseo de seguir utilizando su plataforma para promover una imagen positiva y realista del cuerpo humano.

Mirando hacia el futuro

Con la atención centrada en la salud mental y la imagen corporal, es probable que la industria de la moda y los medios se enfrenten a un escrutinio continuo sobre cómo representan la belleza. Violeta Mangriñán, por su parte, sigue comprometida con su mensaje de energía y salud por encima de la belleza, esperando que su experiencia sirva para inspirar a otros a adoptar una visión más saludable de sí mismos.

En un mundo cada vez más consciente de los problemas de salud mental, la historia de Violeta Mangriñán es un recordatorio de la importancia de la empatía y el apoyo en la lucha contra los trastornos alimenticios.