LOS ÁNGELES, EE.UU. – La actriz estadounidense Rebecca De Mornay, conocida por su papel en la icónica película “Risky Business”, ha expresado su orgullo por la trayectoria de su expareja y compañero de reparto, Tom Cruise. Más de 40 años después del estreno de la película que catapultó a ambos al estrellato, De Mornay ha compartido sus pensamientos en recientes entrevistas con medios norteamericanos.
En conversaciones con Page Six, De Mornay, de 65 años, describió a Cruise como un “brillante intérprete” que ha sabido captar el espíritu de cada época en la industria cinematográfica. “Estoy realmente orgullosa de él”, afirmó, destacando su capacidad para interpretar lo que el público demanda.
Un inicio compartido en Hollywood
La película “Risky Business”, estrenada en 1983, fue un punto de inflexión en las carreras de ambos actores. Tom Cruise interpretó a Joel Goodsen, un estudiante de secundaria que vive una serie de aventuras cuando sus padres se van de vacaciones, mientras que De Mornay dio vida a Lana, una prostituta que se cruza en su camino. Este proyecto no solo marcó el inicio de sus carreras, sino que también fue el comienzo de una relación sentimental que duró aproximadamente tres años.
El film no solo lanzó a Cruise al estrellato, sino que también le valió su primera nominación al Globo de Oro como Mejor Actor en una Comedia o Musical. De Mornay, por su parte, continuó con una carrera sólida en Hollywood, participando en producciones como “The Hand That Rocks the Cradle” y “The Slugger’s Wife”.
Reflexiones sobre la evolución profesional
En sus declaraciones, De Mornay comparó la evolución profesional de Cruise con una metáfora musical: “Él es como un acorde mayor y yo como un acorde menor”, dijo. Esta analogía subraya la magnitud del impacto de Cruise en la industria, especialmente con éxitos de taquilla como la saga “Mission: Impossible” y “Top Gun”.
Durante la filmación en los suburbios de Chicago, De Mornay recuerda haber notado una determinación definida en Cruise. “Estoy muy, muy orgullosa de haberlo conocido desde que estábamos en los suburbios de Chicago y de saber qué quería y dónde está ahora”, comentó, enfatizando el impacto duradero de “Risky Business” en sus vidas y carreras.
Desafíos y nuevos proyectos
Además de reflexionar sobre el pasado, De Mornay también habló sobre su trayectoria personal. En entrevistas con The Independent, confesó que tras el éxito inicial, enfrentó el desafío de no quedar encasillada como “la mujer sexy”. Un cambio significativo en su vida ocurrió tras la muerte de su madre, lo que la dejó con una sensación de incertidumbre personal y profesional.
Actualmente, De Mornay promociona su nuevo proyecto, el thriller independiente “Saint Claire”, donde interpreta a una actriz retirada y abuela del personaje de Bella Thorne, una joven que asesina a depredadores sexuales. “Quería apoyar este proyecto. Es experimental, es alucinante”, comentó sobre el film. “Y Clare no es una víctima, ese mensaje me gusta. Me alegra que me hayan elegido para encarnar este arquetipo de protección maternal”.
En relación a las temáticas actuales, como la divulgación de la lista de clientes de Jeffrey Epstein, De Mornay indicó que no advirtió las similitudes con el guion cuando leyó por primera vez la propuesta.
“Nunca pensé en eso. Es inquietante que pueda relacionarse… No lo vi venir cuando lo leí”, expresó.
A pesar de que sus caminos personales y profesionales han tomado rumbos distintos, el respeto y reconocimiento mutuos entre De Mornay y Cruise persisten. A más de cuatro décadas del estreno de “Risky Business”, ambos actores mantienen la impronta de aquel proyecto en sus carreras, demostrando que el tiempo no ha disminuido el impacto de su colaboración inicial.