jue. Ago 7th, 2025

LIMA, PERÚ – En un panorama político cada vez más complejo, solo 11 partidos peruanos han logrado unirse para formar cinco alianzas, lo que refleja las profundas divisiones y problemas sistémicos dentro de la política nacional. De los 43 partidos existentes, apenas una cuarta parte ha intentado construir un consenso, y en solo un caso se han unido tres partidos. Las demás alianzas son binomios que, a estas alturas, no están exentos de disputas internas.

El deseo de poder en Perú parece haber eclipsado cualquier intento de los partidos y sus líderes por enfocarse en políticas que beneficien al país. En lugar de ello, el enfoque se ha centrado en la cantidad de diputados, senadores y parlamentarios andinos que cada partido puede asegurar en una eventual coalición. Ante cualquier adversidad, muchos optan por competir solos, lo que permite a los líderes mantener el control total sobre sus listas de candidatos. Sin embargo, esto también conlleva una guerra interna de vanidades y egoísmos.

El Castigo de la Dispersión

Según especialistas, esta dispersión podría tener un efecto positivo: los partidos que no logren obtener al menos el 5% en las elecciones congresales desaparecerán. Esto significa que muchas de estas organizaciones, que actúan más como depredadores del poder que como verdaderos partidos políticos, enfrentarán un duro castigo. En el futuro, no será tan fácil inscribirse como partido político, lo que podría limpiar el escenario político de aquellos que solo buscan beneficios personales.

“El elector peruano tiene una gran oportunidad de limpiar la cancha de estos colectiveros informales que transitan por la política gracias a un aprovechamiento congresal,” señalan los analistas.

Financiamiento Estatal: Un Botín Codiciado

El financiamiento estatal, que se otorga a los partidos con representación congresal por un periodo de cinco años, es otro factor que alimenta esta lucha por el poder. Este sistema de financiamiento ha sido criticado como un derroche bárbaro e inadmisible, y muchos argumentan que el próximo Congreso debería considerar su abolición.

La eliminación de las PASO (Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias) ha contribuido a este problema, ya que estas elecciones primarias eran un requisito importante para filtrar a los candidatos menos serios y fortalecer a los partidos verdaderamente comprometidos con el servicio público.

Reflexiones y Futuro

La situación actual plantea una pregunta crucial: ¿será posible que los votantes peruanos elijan sabiamente y concentren su apoyo en un número reducido de partidos que realmente representen sus intereses? La respuesta a esta pregunta podría determinar el futuro político del país.

En conclusión, mientras el panorama político peruano se enfrenta a una encrucijada, los ciudadanos tienen la oportunidad de influir en el rumbo que tomará el país. La necesidad de reformas profundas y de un enfoque centrado en el bien común es más evidente que nunca. Solo el tiempo dirá si los líderes políticos y los votantes estarán a la altura del desafío.