sáb. Jul 19th, 2025

BARCELONA, ESPAÑA – Un nuevo estudio ha puesto en duda la efectividad de la taurina como suplemento para ralentizar el envejecimiento, un hallazgo que contrasta con investigaciones previas que la presentaban como un potencial elixir de la juventud. Publicado en la revista Science, este trabajo liderado por el científico español Rafael de Cabo, del Instituto Nacional sobre el Envejecimiento en Baltimore, EE.UU., cuestiona los resultados de un estudio anterior de 2023 que sugería beneficios significativos de la taurina en la longevidad.

El estudio de 2023, encabezado por Vijay Yadav, mostró que los niveles de taurina en sangre disminuyen con la edad y que su suplementación podría mejorar el sistema inmunológico y prolongar la vida en ratones hasta un 12%, el equivalente a ocho años humanos. Sin embargo, el nuevo estudio de De Cabo encuentra que la taurina no disminuye necesariamente con la edad en individuos sanos y que, en algunos casos, como en hembras humanas y monos, los niveles pueden incluso aumentar.

Desafíos en la investigación sobre el envejecimiento

La investigación de De Cabo destaca la variabilidad de los niveles de taurina entre individuos, lo que complica su uso como biomarcador del envejecimiento. Según los científicos, la relación entre la taurina y los marcadores de salud es inconsistente y depende del contexto, lo que sugiere que los beneficios de la taurina pueden no ser tan universales como se pensaba.

Rafael de Cabo explicó que la taurina es “un metabolito muy sensible a diferentes condiciones fisiológicas”, como la inflamación o el ayuno. Comparó la situación con la glucosa, cuyos niveles pueden variar significativamente a lo largo del día, complicando la decisión de cuándo y por qué administrar suplementos.

Opiniones de expertos y comparaciones históricas

Vijay Yadav, ahora en la Universidad Rutgers, participó en una rueda de prensa junto a los investigadores del nuevo estudio. Aunque sus hallazgos iniciales fueron cuestionados, Yadav no descarta el potencial de la taurina y está llevando a cabo un ensayo controlado con placebo en personas de alrededor de 60 años para obtener más datos.

Luigi Ferrucci, coautor del estudio, subrayó que la variabilidad en los biomarcadores sanguíneos es común y no exclusiva de la taurina. “Otros metabolitos pueden mostrar variaciones de diez veces arriba o abajo en diferentes horas del día”, afirmó Ferrucci, sugiriendo que esta inestabilidad no debe descartarse automáticamente.

Implicaciones futuras y recomendaciones

En el ámbito de la investigación del envejecimiento, no es raro que los beneficios observados en animales no se traduzcan directamente a humanos. En modelos animales, la deficiencia de taurina se asocia con una peor salud y una vida más corta, mientras que los suplementos pueden ser beneficiosos. Sin embargo, en humanos, los suplementos suelen ser más efectivos para aquellos con deficiencias específicas.

Ferrucci concluyó que, con el conocimiento actual, “no hay ningún suplemento que mejore la longevidad” y recomendó una dieta equilibrada como la mejor estrategia para una vida saludable. “Si tienes una dieta equilibrada, todo lo que necesitas está ahí”, afirmó.

Este debate en torno a la taurina resalta la complejidad de la investigación en envejecimiento y la necesidad de más estudios para comprender mejor quién podría beneficiarse de tales suplementos y en qué circunstancias. Mientras tanto, los expertos aconsejan precaución en la suplementación sin evidencia concluyente.