CIUDAD DE MÉXICO, MÉXICO – En el dinámico mundo empresarial, el éxito no es un estado permanente, sino un proceso en constante evolución. Los líderes más efectivos reconocen que, en ocasiones, un equipo necesita más que ajustes menores; requiere un relanzamiento completo. Ya sea debido a reestructuraciones, tensiones internas o cambios estratégicos, el camino hacia la revitalización de un equipo puede ser complejo pero esencial.
Basándonos en una década de experiencia trabajando con cientos de equipos, presentamos una guía para ayudar a los líderes a reencaminar a sus equipos hacia el éxito.
Diagnosticar Antes de Actuar
Un error común entre los líderes es apresurarse a implementar cambios sin comprender primero los problemas subyacentes. Este enfoque puede agravar las dificultades existentes. Antes de actuar, es crucial preguntarse: ¿Está el equipo alineado en cuanto a propósito, objetivos y prioridades?
La comunicación abierta puede ser un desafío, especialmente en entornos grupales o jerárquicos. Las normas culturales y las dinámicas de poder juegan un papel importante en cómo los miembros del equipo expresan sus preocupaciones. El objetivo no es forzar la apertura, sino descubrir lo que realmente está ocurriendo de una manera que funcione para todos. Solo entonces se pueden abordar las causas raíz y relanzar con intención.
Construir Confianza
Para relanzar un equipo, es fundamental reconstruir la seguridad psicológica. Esto se logra creando un entorno donde los miembros se sientan seguros para expresarse y compartir sus ideas. Aquí algunos pasos para comenzar:
- Lidere con vulnerabilidad: Realice revisiones del equipo para entender cómo están los miembros a nivel personal y profesional.
- Fomente el diálogo abierto: Utilice retrospectivas estructuradas del equipo.
- Permita la retroalimentación constructiva: Establezca un proceso donde la retroalimentación sea una responsabilidad compartida.
Clarificar el Propósito y las Formas de Trabajo
Los equipos necesitan una visión clara e inspiradora, especialmente en tiempos de cambio. Sea transparente sobre los desafíos y enfoque al equipo en el futuro:
- Aclare la visión general: Defina el mapa estratégico para alcanzar los objetivos.
- Reafirme el propósito del equipo: Destaque su valor para la organización y los clientes.
- Establezca un tono optimista: Inspire un sentido de agencia y optimismo.
La desalineación a menudo surge de la confusión sobre roles y prioridades. Considere los siguientes aspectos para mejorar la colaboración:
- Roles y responsabilidades: Asegúrese de que todos conozcan sus expectativas.
- Procesos de toma de decisiones: Clarifique quién toma decisiones y cómo se recaba la opinión del equipo.
- Normas y expectativas: Defina comportamientos esperados y la frecuencia de reuniones y retroalimentación.
Construir sobre los Éxitos
Para que el relanzamiento sea sostenible, es crucial enfocarse en victorias rápidas que demuestren progreso y refuercen nuevos comportamientos. Identifique objetivos visibles y alcanzables para los primeros 30 a 60 días y reconozca a los miembros por sus logros.
Los pequeños éxitos generan confianza y refuerzan la dinámica positiva del equipo. La energía de un equipo se moldea por sus interacciones diarias y logros. El relanzamiento es una oportunidad para introducir o renovar rituales que fomenten la alineación y el compromiso, como reuniones quincenales.
Mantener el Impulso
Un relanzamiento no es un evento único, sino un proceso continuo. Mantenga el impulso mediante:
- Seguimiento del progreso: Evalúe regularmente los nuevos objetivos y prioridades.
- Microretroalimentación: Proporcione retroalimentación frecuente, breve y enfocada.
- Reevaluación periódica: Ajuste lo que está funcionando y lo que no.
Relanzar un equipo no es una señal de fracaso, sino de liderazgo. Al tomarse el tiempo para reevaluar, reiniciar y realinear, los líderes pueden reenergizar a sus equipos, fortalecer la confianza y construir la claridad e impulso necesarios para un desempeño sostenido en un entorno cambiante.
Por: Alyson Meister e Ina Toegel