CIUDAD DE MÉXICO – La imagen de dinosaurios rugiendo ferozmente, popularizada por películas como Jurassic World, podría no ser del todo precisa. Un reciente descubrimiento sugiere que algunos dinosaurios, como el Pinacosaurus grangeri, podrían haber emitido sonidos más parecidos al canto de las aves.
La banda sonora de la era de los dinosaurios ha sido, hasta ahora, un misterio. Los rugidos y gritos que escuchamos en el cine son invenciones de los ingenieros de sonido, diseñadas para impactar al público. Sin embargo, los científicos han tenido que basarse en conjeturas, ya que los órganos responsables de la producción de sonido en los dinosaurios no se fosilizan fácilmente.
Descubrimientos Recientes y Simulaciones
Un avance significativo se produjo con el estudio del Parasaurolophus tubicen, un dinosaurio que vivió hace 70 millones de años. Según una recreación del Museo de Historia Natural de Nuevo México, este dinosaurio podría haber emitido sonidos similares a un claxon de barco, gracias a su peculiar cresta craneal. Esta estructura, escaneada con tomografía computarizada, permitió a los científicos simular cómo resonaría si se soplara aire a través de ella.
“Describiría el sonido como de otro mundo. Recuerdo que me dio escalofríos”, declaró Tom Williamson, paleontólogo involucrado en el estudio, a la BBC.
La diversidad de sonidos que pudieron haber emitido los dinosaurios sigue siendo objeto de especulación. Basándose en la forma de los oídos internos y otras cavidades craneales, los científicos han formulado teorías sobre cómo podrían haber sonado estos reptiles extintos.
El Hallazgo del Pinacosaurus grangeri
Un descubrimiento reciente en el desierto de Gobi, Mongolia, ha revolucionado la comprensión de los sonidos de los dinosaurios. Se encontró una laringe fosilizada del Pinacosaurus grangeri, lo que sugiere que este dinosaurio podría haber emitido sonidos similares a los de las aves modernas.
“Este es el primer descubrimiento de un órgano vocal de dinosaurios no aviares. Es probable que el Pinacosaurus usara su laringe para modificar el sonido como los pájaros”, explicó el paleontólogo japonés Junki Yoshida.
La preservación de la laringe, compuesta de cartílagos, es excepcional. Este hallazgo ofrece una nueva perspectiva sobre la comunicación sonora de los dinosaurios, que hasta ahora se había estudiado principalmente a través del oído interno del cráneo fósil.
Implicaciones y Futuras Investigaciones
El descubrimiento del Pinacosaurus grangeri abre nuevas preguntas sobre la capacidad de vocalización de otros dinosaurios. La paleontóloga argentina Ariana Paulina Carabajal, experta en biología sensorial, sugiere que estos hallazgos podrían indicar que algunos dinosaurios tenían una especialización auditiva que les permitía emitir y percibir sonidos agudos.
“Es interesante porque cambia la interpretación de todo el grupo de anquilosaurios y abre la posibilidad de preguntarse: ¿qué otros dinosaurios pudieron tener un desarrollo semejante?”, reflexiona Carabajal.
El paleontólogo Federico Agnolín, del CONICET y la Fundación Azara, destaca que este descubrimiento podría llevar a reevaluar muchos fósiles en busca de estructuras similares. “Tal vez hay algunos investigadores que nieguen que eso es una siringe y van a hablar de otras estructuras. Todo esto lleva tiempo y es parte del debate científico”, comenta Agnolín.
Con los avances tecnológicos y el creciente interés en la paleontología, resolver el misterio del sonido de los dinosaurios parece estar más cerca. La reconstrucción de la banda sonora del Mesozoico es solo cuestión de tiempo.