sáb. Sep 13th, 2025

CIUDAD DE MÉXICO, MÉXICO – Un reciente estudio paleogenómico ha revelado sorprendentes detalles sobre los mamuts colombinos que habitaron el actual territorio de México. Estos hallazgos, liderados por un equipo internacional de investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), desafían las concepciones previas sobre la evolución y dispersión de estos animales extintos.

El estudio, publicado en la revista Science, revela que los mamuts colombinos del centro de México poseían una línea genética materna única, diferente a la de sus parientes en el norte de América. Este descubrimiento se basa en el análisis de 61 genomas mitocondriales extraídos de restos encontrados en la Cuenca de México, específicamente en los sitios de Santa Lucía y Tultepec.

Un Hallazgo Revolucionario

Hasta ahora, los datos genéticos disponibles sobre los mamuts colombinos se centraban principalmente en ejemplares de Estados Unidos y Canadá. Sin embargo, el muestreo en México, que incorporó ADN de mamuts de latitudes tropicales, reveló una variabilidad genética no registrada anteriormente. Federico Sánchez Quinto, del Laboratorio Internacional de Investigación sobre el Genoma Humano (LIIGH) de la UNAM, señaló:

“Por primera vez incorporamos información de latitudes tropicales al muestreo geográfico y encontramos que los mamuts de la cuenca de México tienen linajes mitocondriales muy diferentes a los reportados con anterioridad de Estados Unidos y Canadá”.

Este análisis permitió identificar una nueva rama genética denominada Clado 1G, que se divide en tres sublinajes: 1G.1, 1G.2 y 1G.3. La divergencia entre estos linajes y los de los mamuts más al norte es tan pronunciada como la que existe entre los propios clados de Canadá y Estados Unidos, sugiriendo que la diversificación ocurrió hace más de 400.000 años.

Implicaciones Sobre la Vida Social de los Mamuts

Los investigadores también estudiaron la proporción de machos y hembras en los restos encontrados, descubriendo una proporción casi equilibrada. Este hallazgo contrasta con los yacimientos de mamut lanudo en Siberia, donde predominan los restos de machos. En México, la presencia de grupos familiares más amplios, compuestos por hembras, crías y machos adultos, sugiere una adaptación social a desafíos ambientales únicos de la región.

El tamaño corporal de estos mamuts era impresionante, alcanzando más de cuatro metros de altura y un peso de alrededor de diez toneladas, con defensas que podían superar los cinco metros. La datación de los restos más recientes ubicó a estos mamuts habitando la región entre hace 12.000 y 20.000 años, hacia finales del Pleistoceno.

Perspectivas Futuras

El estudio también ofrece una proyección para futuras investigaciones. El análisis del genoma nuclear, más allá del mitocondrial, permitirá reconstruir en mayor detalle las rutas migratorias, los procesos de mezcla y las razones detrás de la extinción del mamut colombino. Este enfoque podría proporcionar una comprensión más completa de cómo estos gigantes prehistóricos interactuaron con su entorno y se adaptaron a los cambios climáticos.

Con estos hallazgos, los científicos han duplicado la cantidad de información genética disponible sobre la especie, abriendo nuevas vías para explorar la historia evolutiva de los mamuts colombinos. La investigación no solo amplía el conocimiento sobre estos animales extintos, sino que también ofrece una ventana única al pasado ecológico de la región.