vie. Jul 18th, 2025

ALMERÍA, ESPAÑA – Por primera vez en la historia de España, millones de personas recibieron una alerta de terremoto en sus teléfonos móviles antes de sentir la sacudida. Este sorprendente evento ocurrió el pasado lunes al amanecer, cuando un seísmo de magnitud 5,3 sacudió las costas de Almería. La alerta fue emitida por los propios smartphones, que detectaron el terremoto sin la ayuda de una red de sismómetros tradicional.

El sistema de alerta temprana, desarrollado por Google, envió notificaciones a cinco millones de dispositivos Android segundos después de que el terremoto comenzara. Según el Instituto Geográfico Nacional (IGN), el seísmo se originó a 3 kilómetros bajo el fondo del mar Mediterráneo. Esta innovadora tecnología ha recibido recientemente el respaldo de la comunidad científica, con un estudio publicado en la revista Science que valida su eficacia.

La tecnología detrás de la alerta

El sistema de alerta sísmica de Google utiliza los sensores de ubicación, inclinación y aceleración de los smartphones para detectar perturbaciones sísmicas. Richard Allen, sismólogo y autor principal del estudio en Science, explica que las ondas P, las primeras en llegar tras un terremoto, viajan más rápido que las ondas S, que son más destructivas. Esto permite que los teléfonos detecten el seísmo antes de que las ondas S lleguen a las ciudades.

“Unos 5,5 segundos después del origen estimado del terremoto, las primeras ondas llegaron a los teléfonos de la ciudad más cercana”, comentó Allen.

El sistema, que comenzó a desplegarse en 2021 en países como Grecia y Nueva Zelanda, ha sido implementado en 98 países. Hasta marzo de 2024, Google envió alertas para 1.279 terremotos con magnitudes superiores a 4,5, mejorando la precisión de las estimaciones con el tiempo.

Desafíos y limitaciones del sistema

A pesar de su éxito, el sistema no es infalible. Ha emitido tres falsas alertas debido a tormentas y otras interferencias. Además, no puede detectar terremotos que ocurren en medio del océano o en áreas poco pobladas. Juan Vicente Cantavella, director de la Red Sísmica Nacional de España, señala que estas limitaciones son comunes a todos los sistemas de alerta temprana.

“Es un problema físico, que ante un terremoto muy intenso sufre cualquier sistema de alerta temprana, incluso los basados en sismómetros de alta precisión”, explica Cantavella.

El sistema también enfrenta críticas sobre la responsabilidad de las alertas, ya que son emitidas por una empresa privada. Elisa Buforn, catedrática de Sismología, destaca la importancia de que estas alertas se integren en un sistema público de alerta temprana.

El futuro de las alertas sísmicas

Marc Stogaitis, ingeniero jefe de software de Android, defiende el sistema como una herramienta complementaria a las infraestructuras existentes, especialmente útil en países con menos recursos. En España, se está estudiando la implantación de un sistema público de alerta temprana, centrado en el Atlántico, donde se originó el gran terremoto de Lisboa en 1755.

Buforn, quien ha trabajado en el desarrollo de sistemas de alerta sísmica temprana, ve el potencial de la tecnología de Google para concienciar a la población sobre la importancia de estas alertas. Sin embargo, advierte que, en casos de terremotos superficiales como el de Lorca en 2011, ningún sistema de alerta podría prevenir los daños.

El avance de la tecnología móvil en la detección de terremotos representa un paso significativo hacia la mitigación de desastres naturales. Con una mayor integración y desarrollo, estas alertas podrían convertirse en una herramienta esencial para la seguridad pública en todo el mundo.