jue. Jul 3rd, 2025

CNN — La gira Eras Tour de Taylor Swift, que concluyó su último concierto el domingo, no solo ha dejado una marca indeleble en la historia de la música por ser la más taquillera de todos los tiempos, sino que también ha desatado una tormenta legal que podría cambiar el futuro de la industria de venta de entradas.

El tour, que ha impulsado el turismo global y se ha convertido en un hito para millones de fans, ha puesto a Ticketmaster y su empresa matriz, Live Nation, bajo el escrutinio del Departamento de Justicia de Estados Unidos. La posibilidad de que Live Nation se vea obligada a disolverse está sobre la mesa, un desenlace que podría transformar radicalmente el mercado de conciertos.

El colapso de Ticketmaster y la ira de los fans

Cuando las entradas para el Eras Tour salieron a la venta en otoño de 2022, los seguidores de Swift, conocidos como “Swifties”, estaban listos para la compra. Sin embargo, la plataforma de Ticketmaster colapsó en la primera hora. Los fans enfrentaron largas esperas y constantes caídas del sistema, mientras que estafadores y bots adquirieron entradas para revenderlas a precios exorbitantes.

La frustración de los aficionados resonó en las redes sociales y llegó hasta los pasillos del Congreso. El Senado estadounidense convocó a los ejecutivos de Live Nation para una audiencia pública, donde el senador Richard Blumenthal destacó el “asombroso logro” de unir a republicanos y demócratas en una causa común contra la empresa.

La demanda del Departamento de Justicia

En mayo, el Departamento de Justicia presentó una demanda contra Live Nation, alegando abuso de poder para reprimir la competencia y obligar a los consumidores a pagar más. La demanda también acusa a la empresa de intimidar a artistas y salas para que utilicen sus servicios. Live Nation ha calificado estas acusaciones de “infundadas”.

La empresa controla aproximadamente el 80% de la venta primaria de entradas para conciertos en Estados Unidos y posee 265 recintos. Incluso dentro de estos espacios, Live Nation sigue obteniendo ganancias significativas mediante la venta de alimentos y bebidas, como margaritas a más de 30 dólares en el Walnut Creek Amphitheatre en Raleigh, Carolina del Norte.

El futuro incierto de Live Nation

A pesar de la demanda, las acciones de Live Nation han subido casi un 50% este año, impulsadas por la continua demanda de conciertos. Sin embargo, los analistas están divididos sobre el futuro de la empresa. Algunos esperan que la administración de Joe Biden mantenga su enfoque estricto en la aplicación de leyes antimonopolio, mientras que otros creen que podría suavizarse.

Joe Berchtold, presidente y director financiero de Live Nation, expresó su esperanza de que el gobierno vuelva a un enfoque más tradicional de la política antimonopolio. Sin embargo, la administración entrante de Donald Trump podría seguir adelante con la demanda, dado el apoyo bipartidista que ha recibido.

Opiniones de expertos y el camino a seguir

Adam Wolfson, abogado antimonopolio, considera que es poco probable que el Departamento de Justicia abandone el caso bajo la administración Trump. Gail Slater, recientemente nombrada para dirigir la división antimonopolio del Departamento de Justicia, es conocida por su enfoque agresivo en la aplicación de estas leyes.

La frustración bipartidista con Live Nation-Ticketmaster sugiere que el caso podría continuar, independientemente de los cambios políticos. La resolución de esta demanda podría redefinir el mercado de conciertos y la experiencia de los fans en el futuro.

Con el legado del Eras Tour aún resonando, el desenlace de esta batalla legal podría marcar un antes y un después en la industria musical.