dom. Sep 14th, 2025

CIUDAD DEL VATICANO – La Plaza de San Pedro se transformó en un escenario de emoción y fraternidad el sábado, cuando miles de drones formaron el rostro del papa Francisco en el cielo durante un espectáculo musical y lumínico sin precedentes.

El homenaje se llevó a cabo en el marco del concierto gratuito “Grace for the World”, que atrajo a decenas de miles de personas, convirtiéndose en uno de los eventos más multitudinarios del año en el corazón de Roma. Este emotivo tributo coincidió con el cierre del tercer Encuentro Mundial sobre la Fraternidad Humana.

Un espectáculo de unidad cultural

El momento más conmovedor de la velada llegó cuando el tenor italiano Andrea Bocelli y el rapero estadounidense Jelly Roll interpretaron el clásico himno religioso Amazing Grace, mientras la imagen del papa Francisco iluminaba el cielo romano. La fusión de estilos tan diversos, junto con el despliegue aéreo de 3,500 drones, simbolizó la diversidad cultural y la fuerza de la música como vehículo de unidad.

El evento fue co-dirigido por el cantautor estadounidense Pharrell Williams y Bocelli, quienes reunieron un elenco internacional de renombre. Entre los artistas destacados estuvieron el cantautor estadounidense John Legend, la franco-beninés Angélique Kidjo y el rapero tailandés BamBam, reforzando el carácter global del espectáculo.

Contexto y mensajes de paz

El homenaje a Francisco se enmarcó en el cierre del tercer Encuentro Mundial sobre la Fraternidad Humana, una serie de reuniones que surgieron tras la publicación en 2020 de la encíclica Fratelli Tutti (Todos Hermanos) del entonces pontífice. Este texto, considerado una de sus obras más trascendentes, aboga por un mundo basado en la paz, la solidaridad y la fraternidad universal.

Aunque el actual papa, León XIV, pianista de formación clásica y conocido amante de la música, no asistió al concierto —según su agenda oficial—, su presencia se sintió en las palabras dirigidas a los participantes del encuentro. En su discurso, el pontífice subrayó:

“El mundo está marcado por conflictos y divisiones, y ustedes están unidos en un fuerte y valiente ‘no’ a la guerra y ‘sí’ a la paz y a la fraternidad”.

León XIV también destacó el papel de los artistas en la difusión de este mensaje universal:

“Quiero agradecer a los artistas que, a través de su creatividad, difundirán este mensaje a todo el mundo desde la magnífica columnata de Bernini”.

Impacto global y transmisión

Con capacidad para decenas de miles de asistentes, la Plaza de San Pedro acogió a multitudes que vivieron un espectáculo que combinó música, espiritualidad y tecnología. El concierto fue transmitido en directo por cadenas de televisión estadounidenses e italianas, permitiendo que el homenaje al papa Francisco y el mensaje de fraternidad llegaran a audiencias de todo el mundo.

Previo a la presentación, Pharrell Williams resumió el espíritu del encuentro en un mensaje difundido en Instagram:

“Juntos, reflexionemos a través de la música para difundir el mensaje de unidad y gracia para toda la humanidad”.

El evento no solo celebró la figura del papa Francisco, sino que también subrayó la importancia de la música y el arte como herramientas poderosas para promover la paz y la unidad en un mundo cada vez más dividido.