CUSCO, PERÚ – La crisis en el sector turístico de Cusco ha alcanzado un punto crítico debido al bloqueo de vías ferroviarias en Qoriwayrachina, dejando a numerosos turistas atrapados en Machupicchu Pueblo. Sin embargo, una tregua temporal ha permitido la organización de un tren humanitario para evacuar a los visitantes.
La Defensoría del Pueblo anunció que se ha acordado una tregua de 18 horas con los manifestantes, vigente desde las 2:00 p.m. del martes hasta las 8:00 a.m. del miércoles. Esta pausa en las protestas ha sido crucial para facilitar el transporte de los turistas varados.
Detalles del operativo de rescate
El general Julio Becerra, jefe de la Región Policial Cusco, informó que un tren humanitario partirá de Machupicchu Pueblo a las 9:00 p.m. con destino a Ollantaytambo. Se espera que el tren llegue entre las 10:30 p.m. y las 11:00 p.m.
“Estamos esperando que la empresa privada, que son los que llevan los trenes, den la disposición para proceder a hacer que los turistas que se encuentran varados, además también de personas que han entrado por Santa Teresa caminando a Machupicchu, puedan abordar este tren,” declaró el general Becerra a RPP.
El tren humanitario está diseñado para transportar aproximadamente a 200 turistas, y contará con resguardo policial para garantizar un viaje seguro. “Nosotros tenemos la convicción y el acompañamiento de la Policía en todo momento para efectos de que este tren, que salga de Machupicchu hacia Ollantaytambo, llegue sin ninguna novedad,” añadió Becerra.
Contexto de la crisis
La situación en Cusco se ha visto agravada por las protestas sociales que han afectado las operaciones turísticas en una de las regiones más visitadas de Perú. Las manifestaciones, motivadas por demandas políticas y sociales, han interrumpido el transporte, afectando no solo a los turistas sino también a las comunidades locales que dependen del turismo como fuente principal de ingresos.
El turismo en Machu Picchu es un motor económico vital para la región, y cualquier interrupción tiene repercusiones significativas. Según estadísticas del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo de Perú, Machu Picchu recibe anualmente a más de un millón de visitantes, generando ingresos sustanciales para el país.
Implicaciones y próximos pasos
La tregua temporal ofrece un respiro, pero la situación sigue siendo tensa. Las autoridades locales y nacionales están trabajando para encontrar soluciones a largo plazo que puedan evitar futuras interrupciones. El defensor del Pueblo, el doctor Luque, ha sido fundamental en las negociaciones, buscando un diálogo abierto entre las partes involucradas.
“Se ha previsto la suficiente cantidad de efectivos de la Policía Nacional estén delante de ellos utilizando un monorriel, en el cual van a estar haciendo una especie de liebre para tener la certeza de que la vía está libre y los trenes pueden circular sin ningún problema hacia esta ciudad,” explicó el general Becerra.
El éxito de este operativo podría servir de modelo para futuras acciones en situaciones similares, subrayando la importancia de la cooperación entre el sector público y privado para resolver crisis que afectan al turismo y, por ende, a la economía local.
Con el tren humanitario en marcha, se espera que los turistas puedan regresar a sus destinos de origen sin mayores inconvenientes, mientras las autoridades continúan trabajando para estabilizar la situación en Cusco.