dom. Jul 20th, 2025

ESPAÑA – En un intento por mejorar la movilidad urbana y reducir la congestión en las grandes ciudades, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha propuesto una serie de medidas innovadoras. Entre ellas, destaca la exigencia de que los vehículos en ciudades como Madrid lleven al menos a dos personas a bordo, inspirándose en las políticas de carriles VAO de Europa.

Estas propuestas, aún en fase de análisis, buscan también implementar un sistema de tarifas para los coches no residentes que circulen por ciertas carreteras españolas, similar a lo que ya ocurre en las Islas Baleares. La medida incluye el pago de un euro diario, con el objetivo de gestionar mejor el tráfico y reducir la contaminación.

Medidas en las Islas Baleares

En las Islas Baleares, ya se han puesto en marcha iniciativas para disminuir la congestión, especialmente durante la temporada alta. En Formentera e Ibiza, los conductores de coches no residentes deben pagar un euro diario y enfrentarse a límites de horarios y controles de acceso.

Mallorca planea seguir estos pasos con tarifas más elevadas, que oscilan entre los 35 y 150 euros, dependiendo de las emisiones de los vehículos. Estas medidas buscan no solo reducir el tráfico, sino también incentivar el uso de vehículos más ecológicos.

Restricción de Vehículos por Vivienda

Otra medida en discusión es la limitación a un solo vehículo por vivienda en las Baleares, una propuesta que emana del Gobierno regional. Esta restricción responde a la creciente preocupación por el número de desplazamientos diarios y la consiguiente congestión.

El plan permitiría excepciones para emergencias, personas con movilidad reducida y residentes permanentes de las islas, buscando equilibrar la necesidad de movilidad con la sostenibilidad ambiental.

El Futuro de la Movilidad en España

La DGT, bajo la dirección de Pere Navarro, está explorando la implementación de tecnología avanzada, como sensores y radares, para verificar el número de ocupantes en los vehículos. Este enfoque se asemeja al utilizado en Francia y otros países europeos, donde la tecnología ayuda a garantizar el cumplimiento de las normativas de tráfico.

Estas medidas forman parte de un esfuerzo más amplio por transformar la movilidad urbana en España, promoviendo el uso compartido de vehículos y reduciendo la dependencia de los automóviles privados. Aunque aún en fase de análisis, estas propuestas reflejan un cambio significativo en la política de transporte del país.

Expertos en movilidad urbana destacan que estas medidas podrían tener un impacto positivo en la reducción de emisiones y en la mejora de la calidad del aire en las ciudades. Sin embargo, también advierten sobre la necesidad de un enfoque equilibrado que considere las necesidades de los ciudadanos y la infraestructura existente.

En el futuro, la implementación exitosa de estas políticas podría servir de modelo para otras regiones, marcando un paso importante hacia un sistema de transporte más sostenible y eficiente en España.