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Fondos de inversión dominan la propiedad de clubes en La Liga

Editorial

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MADRID, ESPAÑA – La creciente influencia de los fondos de inversión en el fútbol español se ha convertido en una tendencia innegable. Recientemente, Apollo Sports Capital se ha establecido como el principal accionista del Atlético de Madrid, marcando un nuevo capítulo en la historia del club. Esta adquisición sigue a la compra del Espanyol por parte de Velocity Sports apenas un mes antes.

Con estas adquisiciones, ya son siete los equipos de la Primera División que cuentan con capital extranjero como principal fuente de inversión. Este fenómeno no es exclusivo de España, sino que refleja un modelo de multipropiedad en el que pocas empresas controlan equipos en diferentes países. Velocity Sports, por ejemplo, también es propietario del Burnley en Inglaterra.

División de la propiedad en La Liga

Al analizar la propiedad de los 20 equipos de Primera División, se pueden identificar tres grupos distintos. Cuatro equipos, a saber, Real Madrid, Barcelona, Athletic Club y Osasuna, siguen siendo propiedad de sus socios. Estos clubes han mantenido su estructura tradicional, resistiendo la privatización que otros equipos han experimentado.

El resto de los equipos se han convertido en sociedades anónimas deportivas, controladas por empresarios o fondos de inversión. Entre ellos, ocho equipos están en manos de empresarios o empresas locales, como el Sevilla, cuyo control se reparte entre varias familias empresariales de la ciudad. Otros ejemplos incluyen el Alavés, propiedad del Baskonia-Alavés Group, y el Celta de Vigo, bajo el grupo GES.

Capital extranjero en el fútbol español

El grupo de equipos con capital extranjero incluye al Atlético de Madrid, Espanyol, Valencia, Oviedo, Elche, Mallorca y Girona. El Valencia, por ejemplo, es propiedad de Meriton Holdings, una sociedad de inversiones del empresario singapurense Peter Lim. Por otro lado, el Girona es parte del City Football Group, que posee equipos en múltiples continentes.

Un caso particular es la Real Sociedad, que, aunque es una sociedad anónima deportiva, tiene un acuerdo que impide que cualquier accionista posea más del 2% del capital.

Una tendencia global

La tendencia de inversión extranjera en clubes deportivos no se limita a España. En la Premier League inglesa, solo cuatro de los 20 equipos están controlados por empresarios británicos. En Italia, clubes como Milán, Roma e Inter están en manos de inversores extranjeros. Francia presenta un escenario similar, con el PSG, Olympique de Lyon y Olympique de Marsella bajo control no francés.

El City Football Group es un ejemplo de un conglomerado que posee equipos en la Premier League, La Liga, Italia, Estados Unidos, Australia, Japón y otros siete países. Red Bull también controla equipos en Alemania, Austria, Estados Unidos y Brasil, entre otros. Estos grupos no solo se limitan al fútbol, sino que también abarcan otros deportes como el baloncesto.

La creciente influencia de los fondos de inversión y capital extranjero en el fútbol plantea preguntas sobre el futuro de la propiedad y la gestión de los clubes. A medida que estos grupos continúan expandiéndose, el impacto en la cultura y las tradiciones del fútbol local se convierte en un tema de debate cada vez más relevante.

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